Tineo es el lugar ideal para los amantes de la naturaleza
En cuestión de entorno natural, Tineo lo tiene todo. Territorio virgen que combina los colores
del arcoíris en sus bosques autóctonos atravesados por los ríos de montaña que separan los hermosos valles, desde el Carbayo de Valentín a la Fana de Genestaza, pasando por los miradores naturales y la pesca en El Arenero. Todo ello en un entorno idílico para agudizar los
sentidos y disfrutar encontrando la huella de animales como el corzo, el oso o árboles
centenarios que guardan miles de historias.
Carbayo Valentín
Roble centenario de grandes dimensiones. Está catalogado como Monumento Natural del Principado de Asturias y premiado como “Árbol Gigante” en el año 2008.
Fana de Genestaza
Fenómeno geológico singular en la ladera de la Sierra de la Cabra (1.429 metros) donde la montaña se desmorona aflorado cuarcitas.
Coto de pesca El Arenero
El Arenero, a tres kilómetros de la villa de Tineo, es un entorno natural perfecto para la pesca, especialmente de la trucha arco iris, que encontrarás durante todo el año.
Paseo de los Frailes
Pequeño paseo de un kilómetro escaso que recibe el nombre por el recorrido que realizaban los monjes franciscanos de la actual Iglesia de San Pedro y la Capilla de San Roque, disfrutando de árboles autóctonos centenarios y vistas panorámicas excepcionales.
Paseo de las Aves
Paseo de 500 metros por el margen del embalse, dese el que podemos observar numerosas especies de aves acuáticas.
Mirador de Santa Marta
Espectaculares vistas del Río Narcea, Sierra de la Cabra y Cuarto de la Riera.
Podemos encontrar otras vistas panorámicas magníficas desde otros puntos como son la Casa’l Puerto, Piedratecha, Villa de Tineo o Borres.